Rudy Giuliani dio positivo por el coronavirus, anunció el presidente Trump en un tuit el domingo.
“@RudyGiuliani, por mucho el mejor alcalde en la historia de Nueva York, y que ha estado trabajando incansablemente para exponer la elección más corrupta (¡con diferencia!) en la historia de Estados Unidos, ha dado positivo por el virus Chino”, escribió Trump. “Mejora pronto Rudy, seguiremos adelante !!!”
El exalcalde de la ciudad de Nueva York y abogado personal del presidente Trump ha liderado la batalla legal de la campaña de Trump para anular los resultados de las elecciones de 2020 en varios estados.
Giuliani, de 76 años, es el último funcionario de la órbita de Trump en infectarse con el coronavirus durante el transcurso de la pandemia. La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, la asesora senior Hope Hicks y el jefe de gabinete Mark Meadows se encuentran entre otros altos funcionarios que dieron positivo por el virus y se recuperaron desde entonces.
La noticia del diagnóstico de Giuliani llega casi dos semanas después de que su hijo Andrew, también miembro del personal de la Casa Blanca, dio positivo por COVID-19. Según los informes, el mayor Giuliani dio negativo en ese momento.
Andrew confirmó el diagnóstico en Twitter el domingo por la noche, escribiendo que su padre está “descansando, recibiendo una gran atención y sintiéndose bien”.
Una fuente anónima que habló con el New York Times dijo que, según informes, Giuliani está recibiendo tratamiento en el Centro Médico de la Universidad de Georgetown en Washington, D.C.
Giuliani apareció bien en una entrevista de “Sunday Moning Futures” en la que se unió a la presentadora Maria Bartiromo vía satélite para discutir la estrategia legal de la campaña. El presidente anunció su diagnóstico positivo menos de cinco horas después.
La abogada de la campaña de Trump, Jenna Ellis, dijo el domingo que “el equipo legal de Trump continuará con nuestro importante trabajo para luchar por la integridad de las elecciones”. Le deseó a Giuliani una rápida recuperación, pero prometió “seguir adelante” con el esfuerzo legal del presidente desafiando el conteo de votos en estados clave.